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DIÓCESIS DE ZAMORA

JUBILEO TRAS 150 AÑOS DE IDEOLOGÍAS DEL PODER

​ORÍGENES 2/12

2. Delimitación estratégica 2/2

„ad Orientem Novus Archiepiscopatus Mechoacanensis in linea quæ Parœcias Tlazazalca, Pichátaro et Taretam separat ab alteris, videlicet Zacapu, Pátzcuaro, Santa Clara del Cobre et Ario quæ Mechoacanensi Diœcesi subjecta remanent :  ad Aquilonem vero ipse Archiepiscopatus Mechoacanensis in linea quæ supradictam Parœciam Tlazazalca dividit ab illa de la Piedad, ad eandem Mechoacanensim Diœcesim spectante, necnon novus item Archiepiscopatus de Guadalaxara ubi a flumine Barca dividitur ac ad Occidentem idem Archiepiscopatus de Guadalaxara ;  tandem ad Austrum novus Episcopatus de Chilapa et mare Pacificum“.4

Los barbarismos del texto latino delatan, dicho sea de paso, el origen hispano de la autoría de este párrafo. Evidentemente parece ser extraño, que el texto arriba asentado especifique tan meticulosamente los límites del norte entre Tlazazalca y La Piedad, mientras que el sur llega a ser delimitado sólo en general por el territorio del entonces Episcopado de Chilapa en Guerrero, cuya erección fue ejecutada tardíamente en 1862. ¿Por qué hay poco interés por las zonas broncas del sur y tanta atención respecto a La Piedad? A causa de los ingresos económicos aportados por el templo del Señor de La Piedad por supuesto. Cuando Carlos Suárez Cázares preguntó todavía como obispo de Zamora a Alberto Suárez Inda, por qué Morelia a Zamora no cedía La Piedad en razón de su cercanía al obispado zamorano, le respondió Suárez Inda: ¡Con gusto, si tú me entregas San Juan Nuevo!

 

Semejantes intereses han definido los límites territoriales de muchas parroquias en la Diócesis de Zamora, pues los párrocos a menudo aseguran prioritariamente los ingresos económicos, las propiedades e instalaciones de sus propias sedes. En Uruapan ilustran los caprichosos límites entre la Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe y la Parroquia de la Santísima Trinidad sin duda los mecanismos ideológicos del poder con el fin del control de la capilla de Nuestra Señora de los Ángeles.

 

Quizá muy obtuso fue el intento de Salvador Núñez López, quien como Vicario General intentó manipular en aquel tiempo la opinión sobre los límites territoriales ad libitum con una pregunta justificatoria de una decisión ya tomada: «¿Qué pasaría, si de todos modos así se hiciera». Semejante parece el caso de la discusión sobre las nuevas Foranías de Charapan y Paracho en la Sierra. Algunos interlocutores distorsionaron el contenido y los procesos del diálogo de cara a la imposición de decisiones previamente tomadas y ahora son las razones a favor y en contra de tal reorganización las unas con las otras incompatibles.

 

Las estrategias del poder de los últimos 150 años desafían bajo estas circunstancias a una delimitación territorial, cuya justificación se apoye más en razones pastorales que en intereses económicos y en ideologías de poder. La dimensión social del Jubileo no debe reducir su tarea de caridad al asistencialismo y al desarrollo de habilidades por medio de talleres de repujado y filigrana, sino que también debe transformar críticamente las estructuras de poder, las que estratégicamente han favorecido el autoritarismo y la injusticia respecto a ciertos límites territoriales en parroquias de nuestra diócesis.

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4 GARCÍA GUTIÉRREZ, Jesús, comp., Bulario de la Iglesia mejicana: documentos relativos a erecciones,

    desmembraciones, etc. de Diócesis mejicanas (Buena Prensa, México 1951), p. 559.

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