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ÉTICA DE LA RENUNCIA

AL PODER

 

LA INTERACCIÓN DE LA CONCIENCIA

EN EL MARCO DE LA SOLIDARIDAD CON LAS VÍCTIMAS

 

Secuela de mi disertación doctoral

en el contexto de nuestro México violento y convulso

 

2.1.1 Mundo social y acción regulada por normas

 

Para especificar la manera, como los conceptos „acción regulada por normas“ y „mundo social“ co-pertenecen, debe uno partir de las siguientes tesis: a) La acción comunicativa aspira por lo menos a un modo flexible de acuerdo, mientras que la acción instrumental se da por satisfecha con el éxito. b) En contraste con la acción instrumental, la que apunta a la manipulación de los medios, se deja la acción comunicativa coordinar por el acuerdo como meta de los procedimientos de comunicación. c) Cada situación de habla encaminada al acuerdo debe ser al mismo tiempo una situación de acción enfocada a la realización con tres roles de comunicación alternos, a saber con el rol del yo como hablante, con el rol del tú como oyente y con el el rol del él como observador.

 

d) Con el fin de la obtención de un acuerdo racionalmente fundado integra el trasfondo del mundo de la vida no sólo un contexto común, sino el mundo de la vida pone también a disposición recursos de auto-presentación subjetiva. e) Con miras al acuerdo recíproco confluyen tanto el mundo subjetivo de intenciones y vivencias como también el mundo social de relaciones reguladas por normas y el mundo objetivo de contenidos cognitivos en el lenguaje de los interlocutores, pues el lenguaje configura un mundo intersubjetivo con ayuda de dicho acuerdo.

 

f) Cada alocución inteligible deja presuponer, que lo dicho objetivamente es verdadero, que la forma de cada acto de habla es correcta según normas y valores y que lo pretendido subjetivamente con cada acción de habla es veraz. Quienes reconocen recíprocamente estos cuatro presupuestos, formulan implícitamente pretensiones universales a una comunicación encaminada al acuerdo, cuya formal diferenciación se refiere respectivamente a un mundo intersubjetivo, objetivo, social y subjetivo. g) Por consiguiente puede elegir cada interlocutor competente bajo distintas perspectivas del mundo, a las cuales corresponden tanto referencias respectivas al mundo y a la realidad como también áreas de la realidad distintas o bien dimensiones de la realidad, modos de comunicación específicos y tipos de acciones de habla.

 

A partir de cualquier perspectiva del mundo puede referirse cada interlocutor igual al mundo subjetivo, social, objetivo e intersubjetivo. De esta manera autorizan las distintas opciones de las perspectivas del mundo, a elegir una comprensión del mundo descentrada, cuya estructura compleja es resultado de la integración tanto de las perspectivas del mundo y del interlocutor como también de las referencias del mundo subjetivo, objetivo, social e intersubjetivo y del sistema triple de los pronombres personales ›yo-tú-él‹  o bien roles de comunicación.

 

En esta compleja estructura descubre Habermas propiamente la clave para la fundamentación universalpragmática del punto de vista moral de las etapas de desarrollo psicológico de la habilidad para el juicio moral de la conciencia, pues según Habermas se deja esclarecer el proceso de gestación de las perspectivas del interlocutor y del mundo tan sólo en relación con el desarrollo de dicha estructura compleja de interacción. En esta estructura interactúan los roles de comunicación y las referencias del mundo los unos con las otras y su interacción dirige la reconstrucción habermasiana del comportamiento de competencia y cooperación y de la acción estratégica y regulada por normas como tipos de interacción, los que anteceden a la acción comunicativa.

 

Respecto a ello sostiene Habermas tres hipótesis, las que valen como fibra textil del hilo conductor de la fundamentación arriba mencionada. 1) Mientras que se dejan integrar los roles de la comunicación interactiva del yo como hablante y del tú como destinatario en las perspectivas interpersonales del interlocutor, interactúa el rol de la comunicación distanciada del él como observador imparcial en relación con las perspectivas del mundo. 2) Si los roles de comunicación de la primera, segunda y tercera persona se ensamblan recíprocamente con ayuda de la transición desde la etapa ›preconvencional‹ de los tipos de interacción correspondiente a las perspectivas interpersonales del yo y tú hacia la etapa convencional de la perspectiva del observador imparcial, se completa el sistema de las perspectivas del interlocutor. A diferencia de ello se configura el sistema de las perspectivas del mundo sólo a partir de la etapa convencional, en la que se debe subordinar la acción estratégica de la infancia simplemente a la acción regulada por normas. 3) La perspectiva del observador imparcial ayuda a cada interlocutor a la constitución de un mundo social, en el que se orientan interacciones o bien acciones y relaciones interpersonales por normas y valores recíprocamente reconocidos.

 

A consecuencia de ello es la constitución del mundo social en parte resultado característico de la perspectiva del observador, cuya etapa convencional posibilita tanto la confluencia de los tres roles de comunicación como también la integración de las perspectivas interpersonales del interlocutor y las perspectivas del mundo. En este contexto integran las perspectivas del interlocutor, perspectivas del mundo, los roles de comunicación y las referencias al mundo, entre las que se destaca la referencia al mundo social, la estructura compleja de la descentrada comprensión habermasiana del mundo. En el marco de dicho mundo social son reconocidos los valores y normas, las que ayudan a cada interlocutor a la orientación de su acción regulada por normas y a la subordinación de la acción estratégica en relación con la acción regulada por normas, recíprocamente por los distintos interlocutores.

 

Por esta razón interactúa la acción regulada por normas con ayuda de las condiciones normativas del mundo social y por tanto copertenecen los conceptos socio-cognitivos „acción regulada por normas“ y „mundo social“ propiamente en este modo de interacción. Según la opinión habermasiana presupone la teoría de Kohlberg sobre las morales etapas de las perspectivas de aprendizaje socio-cognitivas, las que en seguida se dejan relacionar con los tipos selmanianos de interacción de las perspectivas de acción, dichos conceptos socio-cognitivos.

 

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